Publicado: abril 13, 2020
El dictador nicaragüense, Daniel Ortega continúa sin dar la dara ante la pandemia del COVID-19.
Este domingo se cumplieron 32 días desde que se le vio por última vez el 12 de marzo pasado en una videoconferencia con otros presidentes centroamericanos que discutieron estrategias para enfrentar el coronavirus, encuentro del que no participó el mandatario salvadoreño, Nayib Bukele.
En el evento se vio a Ortega junto a su esposa y vicepresidente del país, Rosario Murillo, y en una intervención de un minuto y once segundos se limitó a decir que estaba de acuerdo con el documento común presentado.
Desde entonces no se ha sabido más de Ortega, por cuya ausencia se tejen varias especulaciones: desde que está gravemente enfermo, o en estricta cuarentena para protegerse del COVID-19, hasta que estaría muerto.
A Murillo tampoco se le ha visto públicamente desde entonces, aunque cada mediodía habla por teléfono a través de los medios de comunicación afines a su gobierno.