Publicado: septiembre 24, 2024
La Asamblea Legislativa aprobó incentivos fiscales para proyectos inmobiliarios de altura, en medio de críticas de la oposición por no priorizar viviendas sociales.
Durante la plenaria, el oficialismo defendió la medida argumentando que generará empleos y dinamizará la economía a través de la construcción y la venta de materiales. “El empleo dignifica y permite cumplir metas personales”, señaló el diputado William Soriano, de Nuevas Ideas, destacando los beneficios económicos de estos proyectos.
Sin embargo, la oposición cuestionó la falta de enfoque en viviendas asequibles para la mayoría de la población. La diputada Marcela Villatoro, de ARENA, subrayó que la mayoría de las nuevas viviendas están dirigidas a personas con ingresos superiores a $1,500 mensuales, mientras que el 60% de los salvadoreños vive en condiciones de hacinamiento. “El 90% gana menos de $453.00, y no se está construyendo para ellos”, criticó Villatoro.
Los partidos Vamos y ARENA presentaron propuestas alternativas para fomentar la construcción de viviendas sociales. Claudia Ortiz, de Vamos, propuso que los desarrolladores construyan tres casas de interés social por cada apartamento vendido por más de $200 mil, mientras que ARENA sugirió incentivos fiscales para viviendas de entre $50 mil y $150 mil. Ambas iniciativas fueron rechazadas por el bloque oficialista.
El oficialismo reiteró que los beneficios de estos proyectos de lujo se verán reflejados en la creación de empleos y en la reactivación de la economía, aunque la oposición insiste en que la medida ignora las necesidades habitacionales de las familias más vulnerables del país.