Publicado: marzo 31, 2019
A menos de 24 horas de haberse suscrito acuerdos entre el régimen de Daniel Ortega y la opositora Alianza Cívica por la Justicia y la Democracia, la policía reprimió con violencia una protesta pacífica que se realizaba en Managua.
Un número indeterminado de civiles que se expresaban en los centros comerciales de Metrocentro y Galerías Santo Domingo, en Managua, en la llamada “Sentada nacional”, fueron atacados por la policía orteguista.
#MESENI denuncia represión y detención de manifestantes en #Nicaragua. La #CIDH llama al Gobierno a respetar el derecho a la protesta de los nicaragüenses y a que aclare la situación de las personas detenidas. pic.twitter.com/sHhQpd5Pqu
— CIDH (@CIDH) March 30, 2019
El hecho más grave sucedido durante el fin de semana, se dio en el estacionamiento del centro comercial Metrocentro, cuando un paramilitar de nombre Germán Félix Dávila Blanco, que se infiltró entre los manifestantes que protestaban, sacó una pistola y disparó a quemarropa, hiriendo a tres jóvenes que fueron llevados a un hospital.
(ketzalynica2018) #germandavilacriminal aquí se ve como el paramilitar d German Davila Banco dispara contra manifestantes, en eso un joven se le tira encima para neutralizarlo y adi se evita más desgracia.Hay más fotos d este 🐸 con arma en la man… pic.twitter.com/wXIfHcy8HT
— @NicaraguaBot (@NicaraguaBot) March 31, 2019
El autor de los disparos fue neutralizado por el resto de manifestantes y al momento de registrarle sus pertenencias le encontraron el carné de militante del Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN) y algunos tiros.
Tras los actos de represión, la Alianza Cívica condenó el incumplimiento de los acuerdos suscritos el viernes y advirtió que el acto de represión pone en peligro el proceso de negociación.
“El régimen Ortega y Murillo ha puesto nuevamente en peligro el desarrollo de la Mesa de Negociación y la búsqueda de salidas pacíficas y constitucionales. El régimen pone en peligro a la ciudadanía, el incumpliendo de su obligación de reconocer y proteger los derechos de las y los nicaragüenses. Denunciamos y condenamos esta nueva represión, y el riesgo que el régimen impone a una solución pacífica y democrática ante la crisis sociopolítica que vive Nicaragua desde abril de 2018, provocando más de 500 asesinados, más de 700 presos políticos, decenas de miles de exiliados, y quiebre de la economía”, expuso la Alianza Cívica.
La Iglesia Católica también ha condenado los hechos, la Arquidiócesis de Managua emitió una nota de prensa donde el arzobispo cardenal Leopoldo Brenes lamentaba los hechos violentos realizados ayer por la tarde, en donde fueron detenidos varios ciudadanos, que posteriormente fueron liberados.
