Publicado: agosto 13, 2021
Si bien la posibilidad de ganar dinero rápido puede resultar atractiva, lo cierto es que el universo de las criptomonedas entraña ciertos peligros. La alta volatilidad, la falta de protección al consumidor o las frecuentes estafas son solo algunas de sus debilidades.
A pesar del rechazo generalizado de los salvadoreños y de las advertencias de los organismos internacionales de los riesgos que traería al país, la Ley Bitcoin entrará en vigencia el próximo 7 de septiembre.
Diferentes estudios han señalado los riesgos que existen al utilizar esta criptomoneda:
La ley de El Salvador que convierte el bitcoin en moneda de curso legal implica que los bancos se enfrentan a mayores riesgos, incluso el de violar las normas contra el lavado de dinero y la financiación del terrorismo, dijo la agencia de calificación Fitch en un informe.
Para el Grupo de Acción Financiera Internacional (GAFI) la falta de transparencia del bitcoin podría aumentar el riesgo de lavado de dinero si las regulaciones no cumplen completamente con los estándares del GAFI.
2. Pone en riesgo la inclusión financiera
Expertos han debatido que el Bitcoin promueva la inclusión financiera, esto debido a que en países pobres, es difícil aún el acceso a teléfonos inteligentes y conexión a internet que permiten el acceso al mercado de las criptomonedas.
Con datos de la Unión Internacional de Telecomunicaciones (UIT), el estudio destaca que El Salvador es el segundo de América Latina y el Caribe con menor penetración de internet con una cobertura del 45.02 %, es decir, 45 de cada 100 hogares. Al país solo le supera Honduras que tiene 39.33 %.
3. Riesgo de fraude
El anonimato característico de las criptomonedas representa un riesgo, sobre todo en materia de seguridad.
Dada la facilidad de las transferencias transfronterizadas, el crecimiento de los delitos cibernéticos relacionados con las criptomonedas han aumentado. Recientemente más de 600 millones de dólares han desaparecido en lo que probablemente ya sea el robo de criptomonedas más grande de la historia.
Los piratas informáticos explotaron una vulnerabilidad en Poly Network, una plataforma que busca conectar diferentes cadenas de bloques (blockchain) para que puedan trabajar juntas.
4. Consumo energético
Si el bitcoin fuera un país, consumiría más electricidad al año que Finlandia, Suiza o Argentina, según un análisis del Centro de Finanzas Alternativas de la Universidad de Cambridge (CCAF, por sus siglas en inglés).
Eso ocurre porque el proceso de "minar" la criptomoneda -utilizando gigantescos servidores que no cesan de trabajar- consume mucha energía.
Según los investigadores, la minería de bitcoins utiliza cerca de 121,36 teravatios-hora (TWh) de electricidad al año, un récord que provoca un fuerte impacto en el medioambiente y supera a una larga lista de países.
5. Volatilidad de la moneda
En el contexto financiero, la volatilidad se define como “la tasa a la que el precio de un valor aumenta o disminuye a lo largo de un periodo de tiempo determinado.”
Los cambios inesperados en el mercado pueden provocar fluctuaciones repentinas y contundentes del precio.
Si eres un comerciante o inversor de bitcoin, fanático de las transacciones a corto plazo, puede que la volatilidad de bitcoin te afecte. Dado que las transacciones a corto plazo implican rápidos intervalos, (cambios bruscos de minuto a minuto o incluso de segundo a segundo) predecir con precisión las fluctuaciones de precios puede que te resulte un desafío.
En El Salvador, la Ley Bitcoin entrará en vigencia el próximo 7 de septiembre, esto pese a al rechazo de los salvadoreños y las advertencias de los organismos internacionales de los riesgos que traería al país.