Publicado: junio 18, 2025
El índice de precios al consumidor (IPC) registró una nueva caída en mayo, marcando una deflación de -0.21 %, según el último reporte del Banco Central de Reserva (BCR). Este descenso se suma al -0.11 % reportado en abril, y refleja una baja sostenida en los precios de diversos productos y servicios, en particular alimentos, vestuario y transporte.
La deflación —es decir, la disminución generalizada y sostenida de los precios en una economía— puede parecer positiva a primera vista, pero los expertos advierten que también puede ser señal de una desaceleración económica.
“El desempleo genera menor demanda. Hay como 10,000 empleos públicos menos y esa es una menor demanda que se debe reflejar en el consumo”, explicó el economista Rafael Lemus. Agregó que esta contracción del consumo podría estar detrás del comportamiento del IPC en los últimos meses.
Los datos oficiales indican que varias divisiones del gasto registraron caídas importantes. La más significativa fue transporte (-5.39 %), seguida por muebles y artículos del hogar (-1.84 %), recreación y cultura (-1.45 %), prendas de vestir y calzado (-0.87 %) y comunicaciones (-0.73 %). Los alimentos y bebidas no alcohólicas también bajaron (-0.69 %) y acumulan ocho meses consecutivos en terreno negativo.
Por otro lado, algunos rubros sí mostraron aumentos. La división de restaurantes y hoteles lideró con un alza del 3.23 %, seguida por alojamiento, agua, electricidad, gas y otros combustibles (2.34 %), bebidas alcohólicas y tabaco (2.20 %) y salud (1.67 %).
Aunque el BCR no ha atribuido oficialmente las causas de la deflación, Lemus considera que también podría influir un factor estacional, como el inicio del ciclo agrícola.
El fenómeno de la deflación es poco común en economías como la salvadoreña y sugiere una necesidad urgente de monitoreo económico más detallado, especialmente ante la falta de datos actualizados sobre empleo y consumo.
Fuente: El Economista