Publicado: marzo 14, 2024
Expertos analizan la verdadera intención del gobierno detrás de una medida presentada como una estrategia para atraer inversión extranjera y revitalizar la economía del país.
Tanto economistas como una diputada de la oposición ven esta iniciativa como un intento de incrementar los depósitos en los bancos locales para asegurar liquidez y continuar financiando la creciente deuda estatal. Esto podría generar complicaciones en el sistema financiero salvadoreño, tal como advirtió la calificadora de riesgo Standard and Poor’s (S&P) en 2023.
La diputada Claudia Ortiz sostiene que "estamos viendo un intento de esta administración de atraer más fondos a la economía nacional para incrementar los depósitos bancarios. Es sabido que el gobierno de El Salvador se está financiando mayormente con los recursos del sistema financiero nacional".
Ortiz enfatiza que esta medida busca aumentar los depósitos bancarios para proporcionar al gobierno un espacio adicional para financiar su deuda mediante el mercado nacional.
El economista Rommel Rodríguez también plantea dudas sobre los motivos detrás de esta medida y señala la desaceleración en el sector financiero, así como la gran cantidad de títulos de deuda de corto plazo del gobierno en manos de los bancos, lo cual aumenta el riesgo para estos.
Según datos del Ministerio de Hacienda, hasta el año pasado, el gobierno tenía una deuda de corto plazo en Letras del Tesoro (Letes) y Certificados del Tesoro (Cetes) que ascendía a $2,800 millones, de los cuales $1,500 millones corresponden a títulos en posesión de la banca privada.