Publicado: septiembre 25, 2018
El presidente de la República, Salvador Sánchez Cerén ha reconocido el método de educación cubana "Yo, sí puedo" el cual es implementado en el país por maestros cubanos.
Bajo la modalidad de "Brigada Educativa Cubana" maestros cubanos han sido desplegados en todo el territorio nacional para apoyar el programa gubernamental para erradicar el analfabetismo. El mandatario ha calificado de "clave" el aporte de este grupo de extranjeros en la implementación de este modelo.
‘Nuestra gratitud también al pueblo y gobierno de Cuba, a la brigada educativa cubana por su contribución al Programa Nacional de Alfabetización’, ha destacado el jefe de Estado.
Sin embargo, el modelo de educación cubano ha sido cuestionado por diferentes analistas, Yoami Sánchez, filóloga y periodista cubana ha declarado al respecto: "La alta calidad de la educación cubana, que tantos en el mundo han enarbolado, es un espejismo que no logró prolongarse más allá de los años ochenta".
Por su parte el Dr. Eduardo Zayas-Bazán, profesor emérito de la Universidad Estatal del Este de Tennessee, indicó en declaraciones para El Nuevo Herald cómo los libros de primaria que invadieron las aulas cubanas desde hace décadas han estado totalmente politizados, como se puede ver en libros de texto para aprender a leer que utilizan frases como ‘En manos buenas el fusil es bueno’; ‘Al final iban los milicianos, sus fusiles en las manos’; ‘Cuba, sí; Yanquis, no’, ‘El Guerrillero es valiente’ o ‘Yo quisiera ser como el Ché.
Las deficiencias que sufre el sistema de educación salvadoreño han sido denunciadas por maestros que exigen al gobierno aumentos de salario y asignación de más presupuesto a la cartera de Estado a fin de ofrecer una mejor calidad educativa.
Un reciente informe del Foro Económico Mundial (WEF, por sus siglas en inglés), ubicó a El Salvador como el país peor evaluado en cuanto a mal manejo de fondos públicos, lo que afecta directamente áreas como la educación y la salud.
También, el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) presentó este mes el informe "Mejor gasto para mejores vidas", que analiza cómo se utilizan los fondos públicos en América Latina, afirmando, "Los países corruptos han sido más frecuentemente asociados con un bajo gasto público en educación y salud pública puesto que es más fácil cobrar suculentos sobornos en grandes proyectos de infraestructura o en sofisticados equipos de defensa que en libros de texto o en salarios docentes"