Publicado: junio 04, 2019
Naasón Joaquín García, líder de la iglesia de la Luz del Mundo, fue detenido por los delitos de tráfico de personas, producción de pornografía infantil, violación forzada de un menor y otros 23 delitos graves. En el año 2015 fue declarado por Nayib Bukele, huesped distinguido.
Los cargos principales contra García son: tráfico de personas, producción de pornografía infantil, violación de un menor y otros delitos graves.
Joaquín García y sus coacusados habrían cometido estos delitos entre 2015 y 2018 mientras dirigía la Luz del Mundo, una organización religiosa internacional con sede en México, con más de un millón de seguidores en todo el mundo.
La denuncia que derivó en la detención fue presentada ante el Tribunal Superior de Los Ángeles; en ella se informa que García y los coacusados cometieron 26 delitos graves en el sur de California durante un período de aproximadamente cuatro años, informó el periódico mexicano Milenio.
Se detalla que los detenidos obligaban a las víctimas a realizar actos sexuales al decirles que si iban en contra de sus deseos iban en contra de Dios.
La Fiscalía local agregó en un comunicado que un tribunal fijó una fianza de 25 millones de dólares para el líder de La Luz del Mundo.
La Secretaría de Cultura de México fue señalada en mayo por dar autorización para un presunto homenaje al líder de la iglesia en el Palacio de Bellas Artes.
Declarado por Nayib Bukele huesped distinguido
Naasón García, recibió de la alcaldía de San Salvador el reconocimiento de Huésped Distinguido, en octubre de 2015.
“En el nombre del Concejo Municipal, queremos otorgarle un reconocimiento y nombrarle, Hijo Distinguido de la ciudad de San Salvador, al gran apóstol Naasón Joaquín García”, dijo el entonces alcalde Nayib Bukele.
“Para nosotros es un honor tenerlo aquí, estoy seguro que con sus oraciones y las oraciones de todas la gente, El Salvador va a poder conocer el poder de la transformación. Si hay algo que puede sacar adelante a nuestro país, es el poder transformador de la palabra de Dios. Para Dios no hay nada imposible”, acotó Bukele.