Publicado: marzo 20, 2024
La justicia española ha resuelto, la prisión provisional de Dani Alves a través de una fianza de un millón de euros y la retirada de sus dos pasaportes (brasileño y español). De esta manera, y tras verificarse el pago, se ha decretado su libertad provisional.
A estos efectos, el tribunal impone como condiciones la prohibición de salir del territorio nacional y, además, la obligación de comparecencia ante la Audiencia Provincial de manera semanal y todas aquellas veces que sea llamado y requerido por las mismas autoridades judiciales.
También se impone al futbolista la prohibición de acercarse a la denunciante a una distancia menor de 1.000 metros de su domicilio, así como de su lugar de trabajo y de cualquier otro sitio que ella frecuente. Tampoco podrá comunicarse con ella a través de ningún tipo de medio hasta que recaiga sentencia firme.
Desde el tribunal se aclara que “conviene recordar que la función de la prisión provincial no puede ser en ningún caso la de adelantar los efectos de una hipotética pena que pudiera serle impuesta al acusado” y que tampoco debe ser la de “impulsar la investigación del delito u obtener pruebas o declaraciones”, argumentando que, si estos son los fines, la privación de la libertad estaría excediendo los límites marcados por la propia Constitución.
Bajo esta explicación, considerando el tribunal que cada escenario es merecedor de su propia valoración, se asienta la base de la libertad condicional del brasileño