Corrupción, sumisión y dictadura
A dos años tomar posesión como presidente de la República, la gestión de Nayib Bukele se ha caracterizado por actos de corrupción, sumisión y el rumbo a una dictadura.
Continuos actos de corrupción por miembros de su gabinte han sido revelador por sendas investigaciones periodisticas, situación que se agravó con las compras institucionales realizadas durante la pandemia del COVID19.
Hasta el momento no ha registro del uso de $30 millones de dólares que México donó al país para implementar en El Salvador el programa Sembrando Vida, tampoco se sabe como se financió el viaje del directoro de Centros Penales en un avión privado propiedad de una gasera mexicana.
Tampoco sabemos por qué el Ministerio de Obras Públicas decidió contratar la oferta más cara para construir el Hospital de El Salvador, ni por qué gastó más de $11 millones en insumos médicos a empresa que vende repuestos para autos en España, menos es conocido la razón por qué compraron millones de dólares en insumos alimenticios a empresas mexicanas ligadas a cárteles de droga, la lista de actos de corrupción sigue... aquí una lista de algunos de ellos.
La gestión de Bukele se vio marcada por un acto que fue condenado a nivel mundial, el domingo 9 de febrero del 2020 los salvadoreños fueron testigos de como el presidente de la República, lideró un operativo para militarizar la Asamblea Legislativa lo cual fue considerado y condenado como un intento de golpe de Estado.
Más recientemente, el 1 de mayo, la bancada oficialista dio un golpe al poder Judicial y destituyó ilegalmente a los magistrados y al fiscal general de la República, un golpe a la democracia del país, así calificado por los Estados Unidos y otras naciones que se unieron a la condena.
Este día Bukele brindará su discurso sobre el segundo año de gestión ante una Asamblea sumisa, a la orden de cualquiera de sus capricho y sin lástima para seguir endeudando a El Salvador.