Acuerdo con Estados Unidos convierte a Guatemala en un lugar de refugio para salvadoreños y hondureños
Los gobiernos de Guatemala y Estados Unidos hicieron oficial un acuerdo migratorio en el que el país centroamericano se convierte en un lugar de refugio para salvadoreños y hondureños.
Dicho acuerdo fue firmado este 26 de julio en el Despacho Oval de la Casa Blanca entre Kevin McAleenan, secretario interino de Seguridad Nacional de los Estados Unidos, y Enrique Degenhart, ministro de Gobernación de Guatemala.
El acuerdo permite a los migrantes de El Salvador y Honduras solicitar protección a EE. UU. desde el territorio guatemalteco, sin embargo, no todos los migrantes de esas naciones quedarán bajo resguardo de ese convenio en Guatemala, mientras se resuelve su pedido de asilo en EE.UU.
El acuerdo indica que las peticiones serán analizadas bajo mecanismos que están por establecerse y de ello dependerá que los migrantes sean resguardados por el convenio suscrito este viernes en Washington.
El secretario de Seguridad Interna de EE. UU., Kevin McAleenan, expuso en una conferencia telefónica con periodistas que si los migrantes viajan hasta la frontera sur de su país “serán devueltos a Guatemala para pedir asilo”. Añadió que espera que el acuerdo entre en vigencia en agosto.
Las reacciones en contra de ese documento no se hicieron esperar y la organización Amnistía Internacional (AI) lanzó una dura crítica.
“Cualquier intento de forzar a las familias e individuos que huyen de sus países de origen a buscar seguridad en Guatemala es indignante”, señaló Charanya Krishnaswami, directora de incidencia en las Américas para Amnistía Internacional en EE.UU.